Quince minutos con Adolfo Cárdenas
Por Pamela Peralta
La Paz, viernes 19 de octubre de 2007
17:15 – 17:30
¿Cómo eran las fiestas de la carrera antes del preste?
La verdad es que no sé mucho porque no había asistido a ninguna fiesta de Literatura hasta antes del preste, pero tenía referencia de que era como cualquier fiesta de Carrera: una fiesta más. Más o menos hacia la década de los noventa comenzó acá ya esta invasión de modelos culturales norteamericanos, cuando los niños comienzan a pedir dulcecitos en Halloween. Entonces la razón, un poco ideológica, de esta fiesta era frenar la influencia de Halloween y rescatar las fiestas nuestras que serían el 1º y el 2 de noviembre, no así el 31 de octubre.
Recuerdo que ese año a mi Taller se le nombró en comisión para tomar parte en la organización del evento y fue Yomar Arandia la que sugirió la idea de que se hiciera algo nuevo. Entonces de ahí es que comenzamos a pensar en una posibilidad contraria al Halloween y se decidió que la fiesta de Literatura tenía que ser indefectiblemente el día 1º de noviembre, vale decir el día de la llegada de los muertos a la tierra. Entonces lo que se hace por lo menos, idealmente, en la fiesta es recibir a toda la gente que ha muerto y que ha tenido contacto con la Carrera, tanto docentes como estudiantes. Desde entonces se ha comenzado a contabilizar la gente que ha fallecido entre la Carrera y porcentualmente son muchos. (…) Lo que se hace básicamente es rescatar la memoria de Todos Santos.
¿Por qué eligieron a este muñequito? Porque según Cleverth había una lista de una serie de nombres como Jaime Sáenz, tomado como santo, o San Lucas que es el santo de los artistas.
En realidad el santo mayor de la Carrera es Jaime Sáenz, pero en esa época el peso saenciano era tanto que se pensó un poco en buscar otra presencia y, un poco por cuestiones de lectura de ese momento, se eligió a Rene Bascopé, que había fallecido y que tenía un personaje más o menos a propósito para este tipo de evento.
Lo que nosotros queríamos era que no se pareciera tampoco a un evento de (…), como son los prestes, sino que fuera algo más laico. Laico he dicho, no light. Entonces, al releer un poco la novela de Bascopé tomamos como personaje, como representación de la obra de Bascopé a este muñequito que, en realidad, es un, si has leído la novela, fetito que lo santifican en un prostíbulo. Entonces hemos hecho un muñeco con plastilina y la verdad nosotros creíamos que iba a ser una parodia de solamente ese año, pero sin embargo en los años siguientes el muñeco se fue convirtiendo en una tradición y también a partir de la docencia de la Carrera un poco como que se lanzó el mito de que era milagroso, de que se les cumplía ciertos deseos a los prestes y prendió un poco la idea.
Durante todas estas fiestas que usted ha podido ver en la Carrera, ¿cuál es la que menos le ha agradado y cuál es la que más le ha gustado y por qué?
La verdad es que yo no he asistido a todas las fiestas de la Carrera. Habré ido a unas cuatro o cinco. La inquietud era un poco extender la fiesta no solamente a la gente de la Carrera sino a toda la gente que estuviera comprometida de alguna manera con literatura. Entonces a la fiesta están automáticamente invitados escritores, poetas, etcétera.
Una de las fiestas más celebradas aparentemente ha sido la de Lucy Jemio, porque Lucy quiso un poco rescatar el preste, pero en su verdadera dimensión, vale decir una fiesta mucho más celebrada, mucho más sonada. Entonces a partir de Lucy, por ejemplo, comenzó a tomar más cuerpo la fiesta de Literatura, ahora es prácticamente es un mito en toda la universidad.
¿Y las que no le han parecido tan agradables?
No, la verdad a todas las que he asistido me han agradado. Probablemente la más pequeña, la primera, porque recién se estaba tratando de experimentar la cosa y se estaba pensando probablemente en diseñar instalaciones que impusieran los túmulos que se hacen para Todos Santos. Se ha logrado en alguna medida, pero no como se hubiera querido. A momentos se había pensado inclusive en contratar a un instalador, a un artista amigo que se prestara para hacer estas cosas, pero no se ha logrado hasta el momento eso. La inquietud también era que el túmulo, el arreglo que se hiciera, fuera parte presencial de la fiesta, ni siquiera parte prioritaria dentro de la fiesta.
¿Alguna recomendación a los del preste de este año? Y a los futuros también
Yo creo que habría que tratar de mantener esta tradición no más, ¿no es cierto? Porque resulta que precisamente a partir del preste de Literatura es que otras Carreras de la universidad comienzan a pensar en rescatar ciertos valores culturales en términos de celebración. San Lucas nace [se refiere a la fiesta que organizan los estudiantes de la Carrera de Artes Plásticas en honor al santo de los artistas] creo que 5 o 7 años después de la Carrera de Literatura. Claro que ellos ya no se imponen la parte paródica, sino que eligen un santo de verdad que vendría a ser San Lucas y a él lo celebran en sus fiestas.
Gracias.